Terminado septiembre y ese infierno que son los exámenes post-vacacionales que siempre suspendo, espero tomar un buen ritmo de actualizaciones durante los próximos meses. Hoy para empezar con buen pie, una tema de actualidad, de hace tan sólo 3 días.

Hay un tipo de persona al que yo llamo, desde ahora, el tipo de “Nada es como antes” Para este tipo cualquier cosa no es lo mismo de buena que cuando salió, más aún sin incorpora alguna mínima variación. El tipo de ya-nada-es-como-antes cambió su grupo favorito por décima vez cuando vendió más de 10000 discos y ahora sólo escucha el primero porque es el único que “suena fresco”. En su lista de diez películas favoritas sólo hay óperas primas porque siempre siempre, ese director tan bueno se vendió un poquito y perdió la originalidad al hacer su segunda peli.
Creo que ya quedó claro de que tipo hablo. Puede que lo conozcas o puede que incluso tú mismo seas uno de esos. ¿Alguna vez escribiste aquello de que barrapunto ya no es lo que era?
¡Yo no! Yo intento no ser ese tipo. Por eso esperaba con ilusión la noche del miércoles.

No quería poner a caldo al programa como dijeron en las geniales promos, yo solo quería ver gags de esos de partirse el ojete, pero nada, no hubo forma. Fue como ver La Hora Chanante a través de los ojos de uno de esos tipos mayores que no le ven gracia a La Hora Chanante. Era lo mismo, lo mismo que siempre con otro nombre, pero ahora no me hacía reir. ¿ Me estaré volviendo uno de esos tipos? Menos mal que mi compi de piso gritaba aún mas indignado que yo: “¿Pero no se han dado cuenta de que no hace gracia?”
Estos tipos son geniales así que sí se tienen que haber dado cuenta, a no ser que….

Teoría 1. Han cambiado de camello. En La Dos no les pasan buenos porros, o con eso de tener un programa semanal se han pasado a los estimulantes…

Teoría 2 ( La buena) Hicieron lo que el fans medio pedía, un calco de LHC, pero mal hecho a propósito. (Lo de repetir “La hora chanante, chanante¡¡¡ con muchachada nui era casi paródico) ¿Y por qué hacer ésto? Se me ocurren dos motivos. Uno es ganar libertad creativa. Haciendo los siguientes episodios con distinta estructura pero más graciosos podrían dejar claro que el secreto no es el programa ni un personaje en particular, sino su humor secreto manchego. El segundo motivo sería simplemente cerrarnos la puta boca a los criticones y reirse a nuestra costa.

Por eso no voy a decir nada más, sólo que jugando a joven Rappel, vaticino que en 3 semanas volveré a escribir un post diciendo que Muchachada Nui me mola, porque eso si, los nuevos personajes tienen potencial.