Hay veces que el azar se empeña en hacernos creer que el destino existe. Pero si existiera, ¿por qué se empeñó en que en este mes de marzo yo aprendiera lo que es un salto de eje?

La historia comienza de nuevo con una pelicula de Satoshi Kon: Paprika. Estaba disfrutándola intensamente cuando Paprika le dijo al poli: Blablabla Salto de eje blablalba
No le habría dado mas importancia si no fuera porque mis vecinos del asiento de adelante comenzaron a reir.
“Mierda -pensé- otra vez se me ha pasado algo en los subtitulos” Pero no, sólo reían ellos y otro tipo en el extremo de la sala: Se trataba de un chiste corporativo. Como cuando un músico cuenta chistes de bajistas y baterías o cuando un ingeniero cuenta uno de aproximaciones matemáticas. Su gracia no radica en el chiste sino en que sólo le intuyes el humor si estás en el mundillo. Me encantan esos chistes.

Unos días después ya no lo recordaba, pero el destino no podía dejarme olvidar la importancia del salto de eje, así que a la más mínima ¡ZAS en toda la boca! Repasando los cortos ganadores de “notodofilms” ” destacaba un título: “Tia no te saltes el eje” Si mis vecinos del cine hubieran estado de nuevo delante mientras veía el corto se habrían desternillado, pero mas bien estarían con el resto del jurado contando chistes graciosisimos de Steadycams y Travellings divergentes.
Pensé verlo de nuevo por si había pasado por alto algun detalle que le diera sentido, lo pensé mejor y mandé a las chonis y al salto de eje al fondo de la memoria. Pero el destino no se rinde.
Siguiente corto: “Suerte”. Que raro, ¿el niño está delante o detrás de la barra? Bueno, mas o menos parece todo normal, otro corto singracia bien hecho. Un momento ¿Y a los de Abuse, que les parece que su corto no haya llegado a la final? Voy a buscar sus blasfemias… Aqui estan. Leo… leo… ¡Oh! :

Los entendidillos se quejaban de que había un salto en el eje de la cámara y que eso era una chapuza, a otros les parecía transgresor

¡Redios! ¡ Otra vez¡ Necesitaba saber por fin qué era el salto de eje. No estaba dispuesto a seguir perdiéndome los cientos de chistes que seguro enseñan en Comunicación Audiovisual sobre el tema y terminé buscándolo en google.

Por fin ya | está | todo claro y quedo en paz con mi destino, pero he vuelto a ver el corto de las chonis y sigo sin encontrarle la gracia.